planta de reciclaje de mascotas
Una planta de reciclaje de PET representa una instalación de última generación diseñada para transformar botellas y recipientes de PET postconsumo en materiales reciclados valiosos. La planta emplea sistemas avanzados de clasificación, tecnologías de lavado y procesos de extrusión para convertir el PET de desecho en productos reciclados de alta calidad. En su núcleo, la instalación cuenta con mecanismos de clasificación automatizados que separan eficientemente el PET de otros materiales mediante sensores ópticos y sistemas de clasificación por aire. El proceso de lavado incorpora soluciones de lavado alcalinas calientes y lavadores de fricción para eliminar contaminantes, etiquetas y adhesivos. Tras el lavado, el material pasa por un proceso de trituración, produciendo escamas de PET limpias. Estas escamas luego pasan a través de un sistema de extrusión sofisticado, donde se funden, filtran y transforman en pellets de PET reciclado adecuados para diversas aplicaciones. Los sistemas avanzados de control de la planta monitorean parámetros de calidad a lo largo del proceso, asegurando una calidad constante en la producción. Las plantas modernas de reciclaje de PET pueden procesar varias toneladas de material por hora, contribuyendo significativamente a la sostenibilidad ambiental mientras crean materias primas valiosas para la fabricación.